Epopeya farmacéutica

Lo que realmente diferencia al ser humano del resto de especies es su gusto por los fármacos. En este valle de lágrimas repleto de plantas y animales domesticables, surgieron culturas y civilizaciones que desarrollaron con afición el noble arte de la farmacia. Tras la revolución neolítica se empezaron a fraguar grandes estados e imperios, aumentando así, los dolores de cabeza. Pero no importó, pues chamanes, brujos, médicos, sacerdotes, boticarios y/o magos, buscaron y algunas veces encontraron, remedios con los que aliviar la jaqueca y muchos otros males de índole diversa. Tras...