Hospiciana

Su Narrativa trata sobre sus recuerdos y sensaciones, experiencias algunas vividas por él mismo a largo del siglo XX, y otras historias anteriores, de finales del siglo XIX, contadas por sus familiares (Elisea Benítez y Aureliano Aceña) y amigos (Inocente Ciudad), historias todas narradas por él con gran dosis de imaginación que nos sumergen en un mundo de ficción con evidentes trazas de una realidad social que todavía pervade en el entorno manchego y sus gentes.

Para Lorenzo se convierte en una obsesión descubrir la verdad sobre la desaparición de la mujer, que bautiza como Lucy. Todo el libro es sobre la información que va obteniendo dificultosamente por los años transcurridos, con la ayuda ocasional, no siempre muy bien dispuesta, de su pareja. Con eso va armando un castillo de naipes que explica en buena medida la trágica historia de Lucy. Incluso tiene un sueño en que una mujer lo mira con cara de súplica, que él interpreta como un ruego de la mujer, desde el más allá, para que descubra su verdad. Cuando casi todo parecía estar...

Arabella Caulfield, one of three orphaned sisters, has clung to an ancient gypsy prophecy as the only way to save her family from endless heartbreak. Now she has twelve days to reach a remote French castle and fulfill her destiny: to marry a prince. Along the way, Arabella meets Lucien Westfall, decorated naval captain and the new Duke of Lycombe.

Mientras las fuerzas leales y traidoras se enfrentan en mil campos de batalla a través de toda la galaxia, en las sombras se está librando una guerra muy distinta: una guerra de audacia y evasión desconocida para muchos, pero que seguramente será la clave de la victoria para ambos bandos. Rogal Dorn y su legión se preparan para defender el Sistema Solar de los ejércitos del Señor de la Guerra Horus, al mismo tiempo que Malcador el Sigilita encarga a sus numerosos agentes y espías misiones de la más alta confidencialidad. El futuro del Imperio está siendo moldeado por manos...

XV Premio de Novela de la Universidad de Sevilla. Nosotros, que nada habíamos escrito todavía, que nada habíamos logrado completar, nos habíamos asumido ya como escritores, y no podíamos ser otra cosa. La vida era el camino hacia la escritura, nuestras ocupaciones diarias la antesala de nuestra ocupación futura y definitiva, escribir. Los no-escritores salíamos a las calles en busca del verso preciso, dispuestos a convertirnos en escritores de verdad. En la misma ciudad, Sala se enamoraba de la mujer más hermosa del mundo y una historia de huidas y encuentros empezaba para él.