Manual para sentir las energías

Una noche de suerte, es una novela pensada en los estudiantes de Literatura. Un relato hilarante de fantasía mexicana, con dosis de erotismo crudo y sobre todo de como corren las páginas con un ritmo desenfadado y quizás con un final esperado. Sin duda es un texto que no trata de mandar mensaje alguno... Bueno si; es una invitación para encender la computadora y crear una historia de la nada. Ya todo está escrito, lo que cambia es cómo se cuenta. No hay modelos a seguir. Solamente la imaginación dicta las Letras.

La obra más emblemática de la autora donde los protagonistas descubren un nuevo placer, más allá del hechizo de unas fuerzas ocultas que dan poder y quitan sentimientos. El secreto: su nombre es Tilo y nació en la India. Ahora es una mujer sin edad que regenta una pequeña tienda de especias en Oakland. Es capaz de leer los anhelos humanos y de encontrar la hierba que cura los males del cuerpo y el alma. La tentación: él es joven y apuesto, pero en sus gestos se refleja la desesperación profunda de quien busca y no encuentra. La magia: él y ella, un hombre y una mujer que descubren...

Mientras en un alto despacho Carvalho es acusado de asesinato, él y su inseparable Biscuter viajan bajo nombres falsos, decididos a dar la vuelta al mundo. Pero alguien no cree que sean dos inofensivos turistas, y el viaje se convertirá en una persecución. Una inquietante visión del mundo contemporáneo, en las «antípodas» de las verdades oficiales.

Javier Sierra, autor del bestseller internacional LA CENA SECRETA, nos ofrece ahora una novela de misterio e intriga sobre una de las leyendas más antiguas y extrañas de América -la dama azul. En Los Ángeles, Jennifer Narody, antigua espía del Departamento de Defensa, sueña repetidamente con una fantasmagórica mujer vestida de azul. Jennifer no lo sabe, pero ese mismo espíritu se apareció más de tres siglos atrás a los jefes de una tribu indígena de Nuevo México. Al parecer, la verdadera responsable de aquellos sucesos fue una monja española que podía "bilocarse" -esto es, que...