Querida guerra mía
Rodrigo Rey, un prestigioso reportero, es enviado a cubrir la guerra de Gaza con el peor equipo posible: un productor novato y un cámara con sobrepeso y problemas de vista. Para colmo, el estallido en Gaza coincide con el inicio del Mundial de Fútbol de Brasil, por lo que sus crónicas apenas reciben atención en los medios. Rey, que acaba de cumplir cincuenta años y se ha dedicado toda la vida a cubrir conflictos armados, está desesperado por seguir adelante con su trabajo. Es lo único que sabe hacer y lo único que da sentido a su vida. Esa euforia que lo mueve de un lado a otro del...