LOS HIJOS DE ABBÁ…

Cada ser en este mundo es una gota de agua en el mar de la existencia, creando la realidad a través de su singularidad, recién en el momento que podemos ver en todo al uno y en uno al todo comprendemos la verdad. Por la piedad del supremo y su gran amor fueron reveladas desde la antigüedad las sagradas verdades a los seres de la humanidad, siendo interpretadas de diferentes formas y provocando separación en su amada creación. Cuando la realidad no puede continuar inclinando su equilibrio hacia la oscuridad el eterno se ha de manifestar, trayendo nuevamente la sabiduría a quienes estén...