Llenas de Gracia
¿Qué ocurre cuando las mujeres entregan sus vidas a Dios? Se convierten en vasijas de gracia, portadoras de sanación, consuelo, ánimo y fortaleza para un mundo atormentado. Lejos de ser pasiva, la mujer de gracia activamente abrazará la voluntad de Dios, activamente buscará a los que sufren y a los que están perdidos y activamente llevará el amor sanador de Dios a los demás. Si ella acepta el llamado de Dios a la feminidad auténtica, su papel, en palabras del Mensaje de Clausura del Concilio Vaticano Segundo, se convierte nada menos que en "ayudar a la humanidad a no degenerar"....