Llamas de pasión

Aunque hacía años que Macy O’James no iba a Sugarville, todo el mundo recordaba lo que había hecho. Ese pequeño pueblo aún no había podido olvidar su supuesto crimen y que consiguiera irse sin castigo. Cuando Macy volvió allí para ayudar a su familia, decidió hacerlo con la cabeza bien alta, sobre todo cuando llegó el día de la reunión de antiguos alumnos de su instituto. En lo que no quería ni pensar era en el hecho de que el hombre más atractivo del pueblo quisiera salir con ella. Aunque Gabriel Donovan, jefe de la brigada de bomberos, y ella generaban suficientes chispas...