La prescripción de Dios para el miedo y la preocupación
¿A dónde acude para disfrutar de la paz que sobrepasa todo entendimiento? Jesús nos da un mandato claro con respecto a preocuparnos: no lo hagan. Aun así, la preocupación y el miedo pueden parecer inevitables e imposibles de vencer. Sin embargo, no lo son. Existe una cura: ser agradecidos. Es posible hallar la paz cuando deja ir el miedo y la preocupación, le da gracias a Dios por su relación con usted y confía en Él para que controle todo en su vida, tanto ahora como en el futuro. Manténgase afianzado a la realidad de la soberanía de Dios, y sepa que Él promete nunca dejarlo o...