Teatro reunido
Tan esquiva siempre la fórmula de un clásico. Suele combinar dos condiciones, tan básicas como improbables de encontrar a la par: una estética no perecedera y un mito; una metáfora capaz de esa mutación que le permita a la realidad acomodársele adentro y tomar su forma. De eso se trata este libro. Los años 1960. Mientras en homogéneo costumbrismo una generación de dramaturgos se preocupa por la alienación de la clase media, un veinteañero no alineado ensueña a Edgar Allan Poe tambaleante de taberna en taberna, y pone parlamento a sus visiones. Se desmarca. La obra se llamará...